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4.11 Preparativos para la salida

Trámites previos a la salida

Cuando se acepta el reasentamiento de una persona refugiada, deben realizarse una serie de trámites antes de su partida, que suelen incluir:

  • recogida de datos biométricos (en los casos procesados por los Estados sobre la base de un expediente);
  • expedición de documentos de viaje y visados/permisos de residencia;
  • asesoramiento y orientación previos a la salida, incluida la recopilación de información adicional relevante para la acogida y el apoyo a la integración;
  • reconocimientos médicos y seguimiento;
  • visados de salida y trámites de viaje; y
  • acompañamiento y organización del tránsito.

Cada Estado de reasentamiento establece sus propios requisitos específicos previos a la salida y es responsable de sufragar su coste. Asimismo, cada Estado determina los servicios de orientación previos a la salida que ofrecerá a las personas refugiadas y si contratará a una organización asociada o prestará estos servicios directamente.

La importancia de la supervisión del ACNUR

Las personas refugiadas que se encuentran en proceso de orientación previa a la salida siguen estando bajo el mandato del ACNUR. Por tanto, el ACNUR debe velar por que se comprendan y aborden los riesgos de protección existentes, incluidos los riesgos de protección para la infancia y los riesgos de violencia de género, a lo largo de los preparativos previos a la partida, y por que se presten los servicios y el apoyo disponibles según sea necesario.

Las responsabilidades específicas del ACNUR en lo que respecta a la tramitación previa a la salida pueden variar en función de:

  • la presencia de otros socios de reasentamiento en un país determinado;
  • la presencia del Estado de reasentamiento y sus acuerdos con la OIM y/u otros socios de reasentamiento;
  • la alianza del ACNUR con la OIM y/u otros socios de reasentamiento.

El ACNUR desempeña una función importante de coordinación entre la OIM y/u otros socios contratados, las autoridades del país de asilo y el país de reasentamiento. A fin de garantizar que esta función de supervisión se lleva a cabo de forma eficaz, los procedimientos operativos estándar en materia de reasentamiento deben designar un punto focal responsable de supervisar los preparativos previos a la salida llevados a cabo por los diferentes socios y partes interesadas y de informar sobre cualquier retraso en la salida de los casos de emergencia y urgentes. El Oficial Responsable se encargará de realizar un seguimiento de las repercusiones de los retrasos en las salidas con los Estados de reasentamiento.

En los procedimientos operativos estándar en materia de reasentamiento se deben especificar las disposiciones y procedimientos locales que se hayan establecido con la OIM (u otros socios) y las responsabilidades conexas.

Agilización de los viajes 

Las oficinas del ACNUR y sus socios deben adoptar medidas encaminadas a agilizar los trámites de salida en los casos de emergencia y urgentes. Además, puede que el ACNUR tenga que supervisar la situación de las personas en situación de riesgo dentro de los casos con prioridad normal, y hacer lo posible para que partan a tiempo.

Cada país de reasentamiento establece sus propios requisitos y procedimientos en lo que respecta a las evaluaciones médicas y la asistencia conexa, a menudo en coordinación con la OIM. Estos procedimientos pueden llevarse a cabo antes de que se adopte una decisión sobre la solicitud de reasentamiento o la solicitud de visado conexa, de manera previa a la salida, y/o justo antes de la salida, al objeto de cerciorarse de que las personas están en condiciones de viajar. En muchos países, la OIM se encarga de realizar las evaluaciones de salud, de la gestión de las afecciones médicas importantes (incluida la tuberculosis), de las vacunaciones, y de evaluar la aptitud para viajar y otros controles médicos previos a la salida. Cuando sea necesario, se pueden facilitar escoltas médicas durante las operaciones de traslado. Los protocolos específicos para estas actividades los define cada país de reasentamiento.

Orientación previa a la salida

La orientación previa a la salida, u orientación cultural, constituye un aspecto clave de los programas de reasentamiento y, en la actualidad, la mayoría de los Estados que reasentan a personas refugiadas ofrecen formación previa a la salida. Suele impartirse después de que las personas refugiadas hayan sido seleccionadas para el reasentamiento y antes de su partida.

Los programas de orientación previa a la salida pueden ayudar a reducir la ansiedad entre las personas refugiadas, pues les permiten hacer preguntas y aclarar malentendidos. Algunos países también lo utilizan como una oportunidad para que las personas refugiadas reasentadas adquieran habilidades que les permitan prevenir, o afrontar de forma más constructiva, las dificultades en el país de reasentamiento. La orientación previa a la salida también puede ofrecer una oportunidad para que el país de reasentamiento recopile información adicional y aumente su comprensión de las necesidades de las personas refugiadas, lo que puede resultar útil para la preparación de los servicios de llegada.

Muchas de las sesiones de orientación previa a la salida son organizadas por la OIM, en representación de los gobiernos nacionales y en estrecha consulta con ellos, mientras que otras son organizadas directamente por funcionarios del Estado de reasentamiento. Si bien cada curso de orientación previa a la salida se adapta a países de reasentamiento y/o grupos de refugiados específicos, entre los temas comunes figuran los procedimientos para viajar, información sobre el estatuto legal, derechos, beneficios y obligaciones, así como información práctica sobre la vida cotidiana en el país de reasentamiento, incluidos los valores, comportamientos y normas sociales comunes.

La duración varía entre unas horas y varios días o incluso semanas (la media es de 3 a 5 días). La mayoría de los países ofrecen orientación previa a la salida poco antes de la partida. Algunos países también organizan sesiones informativas más breves en el momento de la entrevista de selección. Para más información, con ejemplos de países, ver el Manual de Integración del ACNUR.

Documentos de viaje

Cuando las personas refugiadas no pueden utilizar sus pasaportes nacionales para viajar, es necesaria la expedición de otro tipo de documento de viaje, como un Documento de Viaje de la Convención de 1951 expedido por el país de asilo, o un documento que proporcione el Estado de reasentamiento para facilitar el viaje.

En los Estados Partes de la Convención de 1951 y/o su Protocolo, el ACNUR aboga por la expedición de un Documento de viaje de la Convención de lectura mecánica ( MRCTD, por sus siglas en inglés) por parte de las autoridades del país de asilo, de conformidad con la Nota orientativa: Documentos de viaje para refugiados y personas apátridas (2018)y la Conclusión del ExCom sobre documentos de viaje de lectura mecánica (2017) del ACNUR.

Cuando no se dispone de ningún otro documento de viaje, es posible solicitar un documento de viaje ante el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).

Para más información sobre visados de entrada y tránsito para países específicos, consultar el Capítulo por País sobre reasentamiento correspondiente y los cuestionarios previos a la misión. En algunos países, es posible que las personas deban presentar una solicitud formal a las autoridades competentes para solicitar un visado de salida. En tales casos, puede que sea necesaria la intervención del ACNUR ante las autoridades de ese país.

Gastos de viaje

La organización y financiación de los viajes son responsabilidad del Estado de reasentamiento.  Los gastos de viaje son sufragados por el país receptor, ya sea en su totalidad o mediante un plan de préstamos del gobierno. Otras fuentes de financiación son las ONG, los planes de préstamos administrados por la OIM y, en ciertos contextos, el Fondo de Respuesta Rápida para el Transporte (RRTF, por su sigla en inglés) de la OIM.

Transporte

En muchos países, la OIM realiza los arreglos de transporte a nombre del ACNUR o del país de reasentamiento en cuestión.  Si en la localidad existe una oficina de la OIM, la oficina del ACNUR debe organizar los viajes directamente con ésta en el momento en que las personas refugiadas estén listas para viajar y el país de reasentamiento haya confirmado el destino final y la fecha de recepción adecuada. La coordinación entre el ACNUR y la OIM en materia de transporte varía según las regiones y las oficinas en los países. Los preparativos del viaje solo deben realizarse después de haber obtenido los visados de salida y entrada necesarios.

Cuando la OIM no tiene presencia o cuando los acuerdos con la OIM se limitan a determinadas funciones, la oficina del ACNUR puede tener que encargarse de realizar las siguientes tareas:

  • Organizar el traslado de las personas refugiadas desde los campamentos u otras zonas hasta los puntos de partida. Si para ello es necesario el traslado a otro país, las oficinas deberán servir de enlace para obtener el permiso de entrada de los gobiernos en cuestión y, en caso necesario, con el Servicio de Reasentamiento y de Vías Complementarias, de modo que pueda organizarse el viaje con un período de estancia mínimo.
  • Comunicar al Servicio de Reasentamiento y de Vías Complementarias el momento en que las personas estén en posesión de los documentos de viaje y visados necesarios y estén listas para viajar, a fin de que la OIM en Ginebra pueda reservar los vuelos apropiados. Seguidamente, la OIM confirmará los detalles del vuelo a la Oficina del ACNUR, al país receptor y al Servicio de Reasentamiento y de Vías Complementarias.
  • Confirmar la salida de un Caso de Reasentamiento a la OIM, al país receptor y al Servicio de Reasentamiento y de Vías Complementarias.
  • Si por alguna razón una persona no puede viajar según lo previsto, informar inmediatamente a la OIM, al país de reasentamiento y al buró regional correspondiente y al Servicio de Reasentamiento y de Vías Complementarias, según proceda. Dependiendo de las circunstancias, se podrá solicitar a la OIM que vuelva a reservar el viaje y que mantenga informado al país de reasentamiento con el fin de organizar la recepción.